El Pacto de Alcaldes es la iniciativa comunitaria contra el Cambio Climático puesta en marcha por la Comisión Europea con el objetivo de movilizar a los Gobiernos Locales de Europa para ir más allá de los objetivos que, en materia de energía sostenible, fijaron en su día los Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión.
Este Pacto de Alcaldes parte de la base de que la acción descentralizada e impulsada a nivel local resulta básica para cumplir con el compromiso de reducir la emisión de gases de efecto invernadero; asimismo, se hace referencia a que las Entidades Locales, grandes y pequeñas, en toda Europa, ya están contribuyendo a reducir la contaminación mediante la adopción de programas de eficiencia energética en ámbitos como el transporte urbano y la promoción de fuentes de energía renovable en las áreas urbanas.
La inmensa mayoría de los municipios andaluces decidieron, entre los años 2009 y 2011, adherirse a esta iniciativa, haciendo explícito así su compromiso de combatir los efectos del cambio climático mediante la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Al unirse al Pacto de los Alcaldes, las autoridades locales han mostrado un fuerte compromiso político para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en su territorio al menos un 20% de aquí al 2020, contribuyendo así a los objetivos energéticos y climáticos de la Unión Europea (UE).
Este marco político sin precedentes en Europa donde participan directamente las autoridades locales en la mitigación del Cambio Climático se ha convertido en un movimiento real en la actualidad. El Pacto de los Alcaldes ayuda a las autoridades locales europeas para traducir sus ambiciones de reducción de emisiones de GEI en la realidad, teniendo en cuenta la gran diversidad de actuaciones.
De hecho, el Pacto prevé firmantes con una recopilación de datos armonizados y declaración, que será único en Europa, y ayudarlos a seguir una planificación energética sistémica y de seguimiento a nivel local. Desarrollándolo en conjunto con el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea, sobre la base de la experiencia de la práctica de los municipios y regiones con la intención de alinearse con la mayoría de las metodologías locales comunes, el Plan de Energía Sostenible Acción (SEAP) y las plantillas de control constituyen el marco de información estándar para los firmantes del Pacto. La plantilla del PAES forma el esqueleto de los PAES individuales. Esto permite a los firmantes recopilar y analizar datos de manera estructurada y sistemática, y sirve como base para una buena gestión de la energía. La plantilla de supervisión se centra en el seguimiento del progreso en la implementación de la SEAP.
El Pacto también tiene como objetivo dar reconocimiento y alta visibilidad a las acciones de mitigación del cambio climático individuales llevadas a cabo por los firmantes, así como para inspirar, facilitar los intercambios y la autoevaluación
En este contexto, el principal objetivo de las autoridades locales ha sido presentar un Plan de Acción para la Energía Sostenible (PAES), que actualmente se encuentra en fase de revisión.
El PAES contiene un Inventario de Emisiones de Referencia (BEI), que ofrece un análisis de la situación actual en términos de consumo de energía y las emisiones de gases de efecto invernadero y se esboza un conjunto amplio de acciones que las autoridades locales tienen previsto emprender para alcanzar su objetivo de reducción de emisiones de GEI. Los firmantes también se comprometen a vigilar e informar sobre su aplicación SEAP cada dos años después de su presentación y en este proceso nos encontramos dentro de los municipios andaluces.
La eficiencia energética en Territorios debe ser un pilar estratégico a impulsar por todos los actores locales. Las actuaciones programadas en el Plan de Acción deben conducir a la gestión eficiente de la energía a nivel local con criterios de sostenibilidad, con seguridad en el abastecimiento, y con competitividad para favorecer con ello al crecimiento económico de las zonas rurales y la creación de empleo.
Desde CONSIDERA estamos trabajando asesorando a las diferentes unidades de coordinación andaluzas en la utilización de herramientas de gestión que nos permitan dar un paso más allá en la búsqueda de resultados, obteniendo información práctica que priorice las políticas públicas en el ámbito de la gestión energética local.